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    Larga y merecida ovación Aki Kaurismaki

    'Le havre' convence tanto a conversos como profanos por su inteligencia, sencillez y belleza. Nos zambullimos en el cine de autor con Cavalier y Dumont

    Atravesado el ecuador del festival aún quedan un puñado de nombres importantes por enseñar sus cartas: Lars von Trier, Takashi Miike, Nicolas Winding Refn, Pedro Almodóvar, Paolo Sorrentino (y sólo cito los de la competición oficial)... cineastas que, visto lo visto hoy en el pase de 'Le Havre'de Aki Kaurismäki, lo tienen bastante complicado para arrebatarle la Palma de Oro al realizador finlandés. Y es que la película de Kaurismaki es a la vez un destilado perfecto de sus virtudes como cineasta -una puesta en escena minimalista, como si Fassbinder estuviera rodando un polar francés, con pocos personajes y escasos pero gloriosos diálogos- y un paso adelante a la hora de expandir su particular microcosmos dramático hacia otros terrenos genéricos. La película se desarrolla en, precisamente, la ciudad de Le Havre, en la zona de Normandía, y es a la vez un película-denuncia -retrata los problemas de la inmigración- como un thriller bañado en valium -los ritmos policiales son estáticos- y un drama romántico -un elemento desestabilizador (una enfermedad) golpea al matrimonio protagonista-; pero, por encima de todo, 'Le Havre' es una comedia sublime, más cerca de Buster Keaton que de Charles Chaplin, que combinando poquísimos elementos es capaz de alcanzar momentos de deslumbrante belleza. Además, esta es otra película "con milagro". Y es que, sin destripar nada, Cannes ya nos ha ofrecido unos cuantos... A su término la película recibió la ovación más larga y emotiva de lo que llevamos de festival.

    Bruno Dumont y sus actores presentando 'Hors Satan'

    Volvemos a la sección Un certain regard, y lo hacemos con uno de nuestros directores franceses favoritos: Bruno Dumont, cineasta bressoniano por excelencia, retratista de mundos ultraviolentos a través de la mirada de unos personajes alienados, frágiles, white trash a la francesa. 'Hors Satan', recibida con tibieza por la crítica, es su particularísimo salto al cine fantástico, más concretamente, en el subgénero de los exorcismos y las posesiones (más o menos) diabólicas. Relato elíptico, con apenas una pareja protagonista a la que se retrata paseando por el campo y rezando, y con súbitos estallidos de violencia seca y expeditiva, es más un regreso a los primeros films del cineasta tras el virtuosismo alcanzado con la mística 'Hadewijch' (vista en la oficial de San Sebastián hace un par de años). Nada malo, en principio, aunque en los diálogos a pie de sala se llegó a hablar de cierto formulismo en las maneras de Dumont de hacer cine. Sea cierto o no (nosotros nos inclinamos a su favor) lo que resulta indiscutible es que 'Hors Satan' es la película de exorcismos más rara que hemos visto en nuestra vida. Y eso ya es interesante.

    Brad Pitt, enloqueciendo a las masas

    Cerramos con una rara avis en toda regla (como era de esperar, por otra parte). Nos referimos a 'Pater' del veterano cineasta Alain Cavalier, también en competición (aunque por la cara que ha puesto Robert De Niro al término de la proyección, pocas probabilidades creemos que tendrá la obra). Probablemente estemos del título más rasgado y radical de la sección oficial, Cavalier, brillante realizador de diarios filmados, ha rodado en esta ocasión una película a dos manos con el conocido actor Vincent Lindon. Un juego con dos cámaras donde cineasta y actor aparecen como improbables presidente y primer ministro de la república francesa en una farsa brechtiana tan divertida como intrascendente. Y es que pese a lo brillante que podría resultar la idea (y su realización miniaturista) esta naufraga al no poseer ningún tipo de calado. Ignoramos qué tenían los cineastas en mente cuando se aventuraron con tamaña empresa pero, por esta vez, les ha salido esquiva.

    Música de fondo: Alexandre Astruc

    Alejandro G.Calvo

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