De nuevo, los científicos han fijado su mirada en la historia creada por J.R.R. Tolkien. En esta ocasión, un grupo de investigadores ha publicado un artículo en el Journal of Interdisciplinary Science Topics, recogido por Time, en el que hablan sobre la dieta que llevaban los hobbits y, si la película hubiese sido realista, ¡Frodo y Sam habrían muerto en su épico camino!
Las comilonas de los hobbits eran las más envidiadas de toda la Tierra Media: dos desayunos copiosos, grandes comidas a lo largo del día... Los científicos han comparado a los personajes de El señor de los Anillos con los burrámidos, una familia de marsupiales que se alimentan de manera muy similar, y han calculado que Frodo y Sam habrían necesitado 1.800 calorías al día para conseguir acabar con el Anillo Único.
Los hobbits se alimentaban de Lembas, un pan mágico que hace que te ayuda a recuperar fuerzas, pero el estudio ha concluido que habrían necesitado 75 piezas cada uno para alimentarse en el camino. Una portavoz de la universidad de Lancaster ha declarado que "suponiendo que la comunidad tuviese acceso a una cantidad suficiente de pan para mantenerse en marcha, esto no incluiría las enormes cantidades de agua que harían falta para el camino a través de Mordor". Por lo tanto, esto significaría que Frodo y Sam habrían muerto de sed -y pasado mucha hambre- en su travesía.
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