La inspiración de la historia que se desarrolla en Del revés (Inside Out) proviene de la propia experiencia de Pete Docter al ver crecer a su hija. Durante la clase magistral, el director mostraba distintas fotografías de ella a los 9 años de edad en la que se la podía ver sonriente y enérgica, pero, como él mismo decía, a los 11 años parte de su felicidad parecía haberse marchado y desde ese momento las imágenes mostraban a una niña solitaria y más cerrada que dos años antes.
La película muestra ese cambio en la vida de una niña llamada Riley que pasa de interesarse por sus hobbies y su familia, a una chica que se encuentra perdida y empieza a desinteresarse por su alrededor. Aunque, todo esto visto desde dentro de su cabeza.
