Los Oscar son la gran fiesta del cine y el programa de Jimmy Kimmel quiso celebrarlo por todo lo alto invitando a tequila a algunos de los invitados. Guillermo, el colaborador del late-night, hizo toda una declaración de intenciones al comenzar su reportaje -"Voy a hablar con los famosos y a emborracharme"- y, efectivamente, eso fue lo que hizo.
Armado con una botella de Academy A-Water, o más conocido como tequila, Guillermo se acercó a personajes de la talla de Bryan Cranston, Alejandro González Iñárritu o Sacha Baron Cohen para que se animasen un poco antes de la gala. Sin duda, la mejor intervención fue la de Charlize Theron, quien agradeció al reportero su regalo con un beso de esquimal.