María Pedraza decidió que quería dedicarse a la danza con tan solo seis años y, tras una larga carrera como bailarina del Real Conservatorio Profesional de Danza "Mariemma", se ha sorprendido a sí misma involucrada en el mundo de la actuación. Su primer trabajo como actriz constituye la ópera prima del nominado a un Oscar Esteban Crespo (Aquel no era yo), película que se ha presentado en la 20ª edición del Festival de Málaga bajo el título de Amar.
Esta cinta refleja la intensidad con la que dos adolescentes comparten una historia de amor y las diferentes etapas emocionales que definen su relación. La bailarina madrileña fue seleccionada para el papel protagonista de manera atípica: a través de su cuenta de Instagram. "Yo no tenía ningún interés por la interpretación, pero mi chico me dijo que podía probar a meterme en algún curso y me convenció. Después me lesioné, fui a rehabilitación y me mandaron el casting de esta película", explica a SensaCine la recién convertida a intérprete.
Primero hice una prueba y me dijeron que habían encontrado lo que buscaban. Me enteré de que Esteban me había visto por Instagram y quería hacerme la prueba. Él estaba buscando por Instagram y vio mis fotos, vio como me comportaba y se arriesgó
La actriz de 19 años asegura haber estado nerviosa durante todo el proceso de selección, pero, gracias a ello, ha entendido que la interpretación también es un trabajo gratificante que se asemeja mucho a la danza: "El momento entre cajas antes de salir a bailar es exactamente igual que el momento en el que se enciende la cámara". Además, Pedraza afirma que no ha tenido que pasar por un duro proceso de aprendizaje antes de rodar la película. El personaje de Laura guarda muchas similitudes con su personalidad y su vida en general, por lo que ha tenido la oportunidad de improvisar y tener libertad en cuanto al guion se refiere.
Recibir consejos de una de las salvajes de Juego de Tronos
Durante el encuentro con SensaCine, María ha confesado una de las anécdotas más divertidas de su nuevo trabajo: el momento en el que tuvieron que avisarla de que se encontraba junto a una de las salvajes de Juego de Tronos. "En el casting me dijeron que tenía que hacer una prueba con quien iba a ser mi madre en la ficción y Esteban me veía muy tranquila. Hubo un momento en el que me dijo: '¿María, tú sabes quién es esta chica? Es Natalia Tena, la de Juego de Tronos. No tenía ni idea, no era consciente de con quien estaba", recuerda la protagonista.
Los mejores consejos que la bailarina ha recibido, tanto de Tena como de Pol Monen (Isabel), hacen referencia a cómo relajarse antes de rodar una escena comprometida. A pesar de no sentirse capaz de elegir una recomendación en concreto, Pedraza afirma que nunca ha sido 100% consciente de que ha participado en una película y que para ella todo el equipo la ha ayudado a "seguir siendo María y no sentirme más pequeñita". Amar compite por llevarse la Biznaga de Oro en la actual edición del Festival de Málaga y llega a las salas de cine de España el próximo 21 de abril.
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