Todos tenemos un personaje favorito proveniente de una película o serie, gracias al supuesto carisma del que éste hace gala o a una posible identificación. Este sentimiento provoca que a veces no entendamos del todo su psicología, no advirtamos lo problemático de su comportamiento o, en definitiva, se nos escape que el personaje de turno es alguien que en la vida real no te caería bien ni de broma.
Hoy en SensaCine vamos a hacer una lista de estos personajes que gracias al citado carisma, a ser el protagonista de su trama, o a lo divertido de sus diálogos, quizá no te diste cuenta en su momento de que eran unos auténticos malnacidos. Advertencia, igual te duele mucho descubrir la identidad de algunos de ellos.
Barney Stinson en Cómo conocí a vuestra madre
Empezamos fuerte. Barney Stinson. Sí, y no el odiado por todos Ted Mosby (Josh Radnor). Este personaje interpretado por Neil Patrick Harris es, sin duda, el más querido de la serie que finalizara hace unos tres años. No era para menos, ya que el mejor amigo de Ted tenía las mejores frases, vestía siempre sublime y, ni que decir tiene, Patrick Harris lo encarnaba a la perfección.
El único problema era que Barney, analizado fríamente, es una persona narcisista, sociópata y, sobre todo, machista hasta niveles denunciables, que utiliza y engaña sistemáticamente a las mujeres para conseguir tener sexo sin compromiso. La serie se esfuerza en demostrar que Barney es así porque en el pasado, cuando era un pringao, su novia le hizo mucho daño, pero es no le da derecho a manipular posteriormente a tanta gente; de hecho, incluso consiguió que Robin (Cobie Smulders) se casara con él mediante una elaborada mentira. El que acabaran divorciándose y el eterno galán encontrara un personaje femenino a quien respetar en su propia hija -menos mal- no quita lo chungo de todo.
