Muchos fans de Harry Potter habrán soñado en alguna ocasión con participar en una película de la saga. Es un sueño para muchos salvo para Rupert Grint. El actor que dio vida a Ron Weasley ha confesado a Radio Times que es incapaz de ver las entregas de la franquicia a gusto:
Creo que salir en las películas las arruina para mí. No puedo disfrutar Harry Potter más, no como fan ¡No es lo mismo!
Aún así, reconoce que no le importa atender a sus fans: "Termino haciéndome un 'selfie' con un fan la mayoría de los días, pero nunca me ha importado, si eso hace feliz a la gente... Aunque odio cuando la gente toma fotos sin preguntar. Era emocionante cuando tenía 11 o 12 años, pero se hizo más difícil cuando era adolescente. A veces solo quieres ser invisible".
Lo de convertirse en uno de los personajes cinematográficos más conocidos de la última década ha sido pura suerte para Grint, ya que tampoco quería dedicarse a la actuación.
Este mismo año, el actor declaró que casi deja su carrera después de Harry Potter: "Cuando empecé, [la actuación] nunca fue algo a lo que aspiraba. Actuaba en obras del colegio y cosas del estilo. Pero nunca fue algo con lo que soñé. Me refiero, me enamoré de ello durante el tiempo en el que lo hacía. Pero, definitivamente, pensaba, '¿es esto lo que realmente quiero hacer?".
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