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    'Mentes poderosas': Amandla Stenberg, Rue de 'Los juegos del hambre', nos demuestra que sabe español

    La película basada en el libro de Alexandra Bracken llega a los cines este viernes 10 de agosto.

    Amandla Stenberg saltó a la fama mundial tras ser Rue en Los juegos del hambre y emocionar a todos los espectadores con su muerte. De eso ya han pasado más de seis años y la actriz ha crecido para convertirse en la protagonista de Mentes poderosas. En este filme de ciencia ficción, da vida a una de las pocas jóvenes que quedan en el mundo. Solo ha sobrevivido un 2% de los menores de 20 años, pero quienes siguen vivos tienen todo tipo de poderes. El Gobierno quiere encarcelarles, por eso deben huir y buscar un lugar seguro.

    En esta entrevista para SensaCine, Stenberg explica -en un español casi perfecto- los problemas de aceptación por los que pasa Ruby: "Es un poco difícil para Ruby porque tiene miedo de su poder. Es un poco difícil para ella entender como usar su poder, pero cuando se da cuenta de que su poder es una cosa muy buena, se emociona y es muy fuerte".

    Puede que dentro de la gran pantalla, los protagonistas tengan algunos problemas, pero todo cambia detrás de las cámaras. La directora Jennifer Yuh Nelson asegura que los miembros del reparto terminaron haciendo muy buenas migas: "Quería asegurarme de que fuese un grupo de gente joven real. Gente con la que poder identificarse, que les pueda gustar, que puedan imaginar que esta gente existe de verdad, que no solo son personajes. Tuvimos mucha suerte de encontrar un reparto que ya tenían eso. Son grandes amigos. Salen juntos entre tomas en los camerinos solo porque quieren hacerlo. Son gente genial".

    ¿Por qué llamó la atención al productor de Stranger Things?

    El filme está producido por Shawn Levy y Dan Cohen, productores de la famosa Stranger Things. Levy reconoce que quiso adaptar el libro de Alexandra Bracken en el que se basa porque veía que tenía mucha fuerza y trasfondo.

    "Quería contar historias que tuviesen un tono y género diferente. Encontramos el libro de Alexandra Bracken hace muchos años, hace 5 o 6 años, y sentí que tenía temas sobre los que reflexionar y personajes muy vivos. Podía ser algo más que una película para jóvenes adultos, que podía ser emotiva, emocionante, romántica... Que podía estar bien para el cine", explica el productor.

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