Michael Cudlitz y Josh McDermitt, los encargados de interpretar a Abraham y Eugene en The Walking Dead, han visitado Madrid de la mano de Fox con motivo del reciente estreno de la segunda mitad de la sexta temporada de la ficción zombi.
Personajes de peso en la obra homónima de Robert Kirkman en la que se inspira la serie, la introducción de Abraham y Eugene en las tramas fue uno de los momentos más importantes de la cuarta temporada de la ficción y, desde entonces, su importancia como miembros del grupo liderado por Rick Grimes ha ido en aumento.
Michael Cudlitz y Josh McDermitt se han mostrado orgullosos de formar parte de The Walking Dead en su encuentro con la prensa en Madrid, en el que han aprovechado para contar algunas anédotas de su llegada y su paso por la exitosa serie y para hablar del futuro de sus personajes.
Mientras, la segunda mitad de la sexta temporada de The Walking Dead se emite en Fox España de forma simultánea a su emisión en AMC al otro lado del charco.
¿Cómo fue la experiencia de llegar a una serie que ya gozaba de una gran fama en todo el mundo y cuyo equipo y ritmo ya estaba consolidado?
Michael Cudlitz. Fue muy bien. Estaba muy establecida, pero los datos de audiencia subieron después de entrar nosotros [Risas].
Josh McDermitt. Era algo que intimidaba. Porque era una serie de la que ambos éramos fans y yo lo que pensaba es que no quería ser el chico nuevo que entra y se carga su serie favorita. Estoy trabajando a un nivel al que no había trabajado antes. He hecho otras series pero el grado de compromiso y el tiempo que he pasado en esta serie ha superado lo que había hecho antes. El compromiso es divertido porque es una gran serie de la que formar parte. He conocido a una gente fantástica, a amigos fantásticos y estoy muy agradecido de ser parte de ello.
Y, por supuesto, nos recibieron con los brazos abiertos cuando llegamos. Andrew Lincoln ni siquiera tenía que rodar ese día y aún así condujo una hora hasta el set sólo para conocernos y darnos la bienvenida. Y muchas veces no se ve eso en el protagonista de una serie de televisión, porque están ocupados. Pero Andrew dio ejemplo, nos dió la bienvenida y me quitó esa sensación de intimidación.
Tanto Eugene como los habitantes de Alejandría habían vivido con relativa seguridad. En esta segunda mitad de la sexta temporada, todos han de enfrentarse a la realidad del apocalipsis. ¿Cómo va a vivir la gente de Alejandría esa situación?
J.M. Eugene es un hombre nuevo ahora. Ha sido capaz de dar un paso al frente y luchar junto al resto del grupo para salvarse de la horda de caminantes. Antes le faltaba la confianza que hace falta cuando piensas en un superviviente. Pensarías en alguien como Michonne o Daryl. Pero Eugene tiene su inteligencia y la gente de Alejandría son mucho como él. Ellos también están asustados. La ventaja que tiene Eugene es que él ha estado en la carretera, ha estado luchando, o dejando que otros luchasen por él, durante muchos días. Ahora tiene más confianza, como los habitantes de Alejandría. Esto nos ha hecho más fuertes y estoy emocionado por ver cuál será su próximo reto.
¿Cuál es el objetivo de Abraham ahora que sabe que Eugene mentía respecto a la cura?
M.C. Esa es la gran pregunta. Como ya se ha visto, el no tener algo que hacer no es algo positivo para Abraham. Ahora que está teniendo tiempo para pensar en las cosas, no es necesariamente bueno lo que vaya a surgir de eso. Sin embargo, ahora ha habido un cambio. Hay algo de esperanza y gracias a su relación con Sasha en la primera parte se ha dado cuenta de puede haber algo más, a parte de él, a parte de la misión. Que puede haber un futuro.
¿Hay algún compañero de reparto con el que os encantaría ver interactuar a vuestros personajes?
J.M. Personalmente me gustaría ver a Eugene interactuando más con Daryl. Y también ver juntos a Eugene y Carol. Son personajes únicos porque creo que se guardan cartas, que hay cosas que no revelan, así que creo que sería divertido jugar con eso con esos personajes. Creo que pudimos ver a Eugene interactuando con Daryl por primera vez en el último episodio, cuando Eugene le daba a Daryl direcciones. Y fue muy divertido. Me gustaría ver más.
M.C. Me encantaría trabajar más con Lennie [James]. Me encantaría trabajar más con Melissa [McBride]. Me encanta ver su trabajo.
¿Cómo de importante ha sido en la evolución de los personajes el salto temporal entre el episodio 9 y el 10 de la sexta temporada?
J.M. Nosotros no sabíamos muy bien a dónde nos conduciría eso y queríamos que nos guiaran un poco. Teníamos algunas preguntas sobre qué iba a pasar exactamente, ya que hay un hueco que asumimos que es de dos o tres meses aproximadamente y queríamos saber qué es lo que iba a cambiar. Pero los guionistas lo hicieron porque no querían perder el tiempo en enseñar cómo se reconstruía Alejandría y que resultase aburrido. Queremos saber qué pasó en ese tiempo, porque es un mundo en el que las cosas cambian cada día, pero en los personajes en sí creemos que no ha cambiado mucho. Sobre todo porque si los guionistas hubiesen pensado en un gran cambio, hubieran querido mostrarlo en pantalla. Las indicaciones que nos dieron fueron de continuar como antes y lo que acabo de contar en la guía que nos dieron.
¿Cómo fue el recibimiento por parte de los fans a vuestra llegada a la serie? ¿Cómo vivís el fenómeno fan?
M.C. Nos hace sentir muy bien. Somos muy afortunados de poder ganarnos la vida con lo que nos gusta hacer. Los fans adoran lo que hacemos y no hay nada negativo en ello. Es emocionante ser parte de algo que ya forma parte de la cultura popular, que es lo más puntero en televisión y que también es un fenómeno. Hay series por ahí que creo que son fantásticas, series aclamadas por la crítica, con actores impresionantes y que no ocurre nada parecido con ellas. Hace muchos años trabajé en Sensación de vivir y tenía un gran fenómeno fan, pero eran principalmente chicas y jóvenes, que tradicionalmente han sido las más relacionadas con el fenómeno fan. En cambio con esta serie cruzamos todas las barreras, de edad y de sexo. Vamos a convenciones y vemos a familias enteras, grupos de amigos, desde niños hasta abuelas. Y es emocionante formar parte de eso. La respuesta corta es que nos hace sentir bien. [Risas]
J.M. Es impresionante. La última serie en la que estuve fue una de la que nadie oía hablar, de la que nadie hablaba y que fue cancelada tras dos temporadas. Comparándolo con The Walking Dead es como la noche y el día. Ir por la calle y encontrarse con los fans gritando. Sé que no es por mí, que es por la serie. Hace poco en una convención en Londres se nos acercó un hombre con su hija y nos dijo: 'Mira, no tenemos una relación maravillosa, pero vemos juntos The Walking Dead'. Ser parte de algo que a lo mejor está mejorando la vida de alguien y que la gente ve con sus amigos y su familia es algo muy bonito.
Además, no sabes nunca qué vas a hacer después. Igual hacemos algo que se cancela, porque así funciona este negocio, pero es posible que jamás hagamos algo así. Es muy especial formar parte de ello.
Siempre se ha dicho que nadie está a salvo en The Walking Dead. ¿Cómo convive el reparto con esa incertidumbre?
M.C. La muerte es una parte muy importante de la serie. La muerte ocurre en la serie para recordarnos que el mundo no es seguro. La muerte cambia la serie y la hace crecer. Personajes a los que amamos se van cuando su historia ha sido contada y llegan otros personajes nuevos de los que poder enamorarse.
Llegamos a la serie sabiendo que en algún momento nuestro personaje va a morir. No podemos andar pensando en eso. Creo que los actores están más preocupados por su muerte que los actores. Los personajes hablan de ello en la serie. No puedes andar preocupándote de eso. Hay que centrarse en el trabajo. Viene cuando viene. Normalmente hay dos episodios de preaviso, cuando llega el momento. Sabes que va a ocurrir. Y no puedes vivir preocupándote de lo que va a pasa.
¿Qué otro personaje, a parte del vuestro, os hubiera gustado interpretar en la serie?
M.C. Judith (Risas).
J.M. Todo lo que hace es hacer caca, dormir y comer y eso suena genial. Suelo decir que Eugene, porque es un gran personaje que representa a mucha gente, pero esa es como la respuesta fácil. Me gusta Morgan. Es uno de mis favoritos en la serie, es muy complejo y, aunque soy consciente de que no soy un hombre negro, me encantaría interpretarle. Sería divertido.
