Freeway

El director Matthew Bright sorprendió con el descaro bizarro de esta adaptación extrema del cuento de Caperucita Roja convirtiendo a la dulce niña en una delincuente juvenil y al lobo en un sádico serial killer pedófilo. El resultado, un thriller al límite, muy duro y tenso, lleno de perversión moral; una road-movie perturbadora, sádica y loca, que además demuestra ser muy imaginativa desde el punto de vista formal. En el reparto, dos estrellas atípicas: Kiefer Shuterland y una estupenda y descarada Reese Witerspoon. El director sabe explotar todo el carisma de ambos y los envuelve en un sabio cinismo a la hora de extraer toda la hipocresía social que los rodea. Además de todo eso, la película es de lo más entretenida, y casi podríamos considerarla una pieza de culto de los años noventa.  A favor: Reese Witherspoon. En contra: Que pasase tan desapercibida en su momento.