El papel de Caroline Champetier sobrepasó al de los jefes-operadores que trabajaban en la película. El realizador lo reconoce: "Para esta película, le considero sin duda, mi correalizadora. Ella misma se ocupó de la decoración, los trajes y hasta de la elección de una parte del reparto.
El rodaje duró un tiempo muy corto, once días en total. Este dato favoreció la improvisación de algunos actores del reparto.
"Esta película nació de mi encuentro con la imaginación y con la ilusión de los actores, los técnicos y todo el equipo. A día de hoy, este es el proyecto más breve que he hecho, también es el que ha tenido más éxito ", admite el director Nobuhiro Suwa.
Suwa solía trabajar sin guión, basándose en unas pocas páginas de sinopsis. Arte financió el proyecto, mediante la imposición de una cosa, que la película no durara más de 1:40 para permitir su emisión en televisión.