Llamada perdida

Durante unos años, la realización de remakes norteamericanos de los éxitos del cine japonés de terror, fue una práctica habitual. En muy poco tiempo, todas las películas de cierta enjundia, tuvieron su hermano americano, conviviendo ambas simultáneamente como si fuera de lo más habitual. Por desgracia, salvo muy contadas ocasiones (como la estupenda versión de 'Dark Water' que firmó Walter Salles), lo cierto es que ninguna de estas cintas logró estar a la altura de las películas originarias.Es el caso de esta 'Llamada perdida' perpetrada por el francés Eric Valette, que debutaba en el cine de Hollywood sin demasiado tino con esta película que intentaba plasmar la atmósfera enfermiza del original, pero es muy complicado llegar a los niveles de insania de Takashi Miike, aunque fuera en su film más comercial y accesible. El resultado es un subproducto lleno de todos los clichés habidos y po