Cuando éramos reyes

1974 fue un año que marcó la historia reciente de los Estados Unidos de América. El presidente Nixon dejaba el cargo en la Casa Blanca tras estallar el escándalo Watergate, aireado por el Washington Post tras una encomiable labor periodística realizada por Woodward y Bernstein. Sin embargo, la conmoción en la que se encontraba sumida el país fue directamente proporcional a la expectación que provocó uno de los combates que marcarían un antes y un después en el mundo del boxeo. Muhammad Ali aspiraba a hacerse con el título mundial de los pesos pesados contra George Foreman en una pelea que tendría lugar en Zaire. Los dos deportistas regresaban hasta África para enfrentarse sobre la lona de un ring en un duelo que, para la población negra de Estados Unidos, era mucho más que un simple combate.