Marea roja

'Marea Roja' podría haber sido el perfecto thriller militar en la Guerra Fría, concretamente, durante la década de 1980. La diferencia reside en que en vez de ser los soviéticos quienes ponen en peligro a Occidente con la posibilidad de una Tercera Guerra Mundial, en 'Marea Roja' son los rusos nacionalistas. Los tiempos han cambiado y los villanos de la función tan solo mutan de piel y el tándem de productores Simpson-Bruckheimer y el director Tony Scott, lo saben. No existe la politización de la década anterior, en realidad, los rusos nacionalistas son simplemente una excusa para construir una película basada no tanto en la acción como en la tensión creada entre los personajes y sus dudas en cuanto a cómo actuar.Scott crea la que quizá sea su mejor producción –dada su trayectoria no es complicado encontrar su película menos mala- gracias sobre todo a un buen montaje y al dúo de actores