Resacón en Las Vegas : los secretos del rodaje

"En una comedia, los actores suponen el 70%", cuenta el director Todd Phillips. "Sin duda, necesitas una buena historia, pero más allá de eso lo importante es el ritmo, involucrar a excelentes actores cómicos en una situación concreta y dejarles que reaccionen ante ella y entre ellos. El guión fue como un punto de partida para Bradley (Phil), Ed (Stu) y Zach (Alan), y ellos lo tomaron y lo desarrollaron".

Según Ed Helms en 'Resacón en Las Vegas' nunca sabes lo que va a ocurrir: "Todo es una locura, cada escena es como, ¡guau!, ¿de dónde ha salido eso? Pero todo encaja. No se trata de una serie de escenas inconexas; cada gran escena de acción o de locura hace avanzar la historia y llega un punto en que todo se justifica". Cuenta además que fue esta espontaneidad la que dio a Zach Galifianakis la oportunidad de aparecer en tanga. El propio Galifianakis todavía se cuestiona si eso fue una buena idea. "Cuando intervienes en una película como esta y llevas un tanga, sabes que la vas a liar".

En la búsqueda desesperada que emprenden Phil, Stu y Alan pasan muchas cosas. Entre ellas, su encuentro con Mike Tyson merece un lugar destacado. Tyson se interpreta a sí mismo en la película, bromea con su imponente imagen de malo, lleva a cabo un pequeño número de "air drum" y recuerda a todo el mundo que, retirado o no, sigue conservando sus dotes. Y, según Ed Helms, el ex-boxeador es autor de una de las frases más divertidas de la película.

Phillips cuenta el argumento de 'Resacón en Las Vegas' desde dos puntos de vista muy distintos. Sobre el tema dice que "trata de explorar el humor natural y la torpeza de las relaciones entre hombres y las cosas que les unen". Pero la huida de Doug también es muy importante, así que para el realizador el film también "es casi como una versión cómica de 'Salvar al soldado Ryan'"( ...)"Con Doug como el soldado desaparecido y estos chicos haciendo lo indecible para recuperarlo".

El equipo rodó una parte considerable de la película en el famoso hotel Caesar's Palace, todo un símbolo de Las Vegas construido en los años 60. Entre las escenas rodadas allí figuran el brindis en la azotea y la escena del desayuno junto a la piscina. Otro lugar emblemático, el Riviera, proporcionó los interiores del casino, con miles de fichas falsas que el departamento de atrezo creó para llenar las quince mesas de black-jack visibles en una de las secuencias.