La ley de Brooklyn

Para bien o para mal, le debemos a Martin Scorsese que las historias de la mafia sean retratadas mediante el relato de iniciación, el relato del joven que abandona los juegos pueriles para abrazar la vida adulta. Es la estrategia que utiliza Michael Corrent en este retrato de tres amigos cuya adolescencia y juventud transcurre en un barrio neoyorquino italoamericano y con los tentáculos de la mafia entrando y saliendo de sus vidas, definiendo, de alguna manera, su idea de masculinidad y su identidad final. Hay momentos en la cinta de mucha riqueza en la escritura y cierto tono de tragedia à la gran saga americana y de ello hay que darle las gracias a la pluma de Terence Winter (tres veces ganador del Emmy por ‘Los Soprano), pero al mismo tiempo confluyen un buen número de clichés (Mena Suvari como la chica de clase alta objeto de deseo) que perjudican el ánimo y la verosimilitud tan trab