Síndrome

Cuando a Víctor le comunican que le quedan tan sólo unos pocos meses de vida, el futuro que se había construído e imaginado se trastoca. Con esta mala noticia en mente decide salvar a su amor platónico Ana del pozo de autodestrucción en el que está inmersa. Tras espiarla varios días seguidos, una noche la secuestra y la encierra con la intención de que consiga vencer sus adicciones. Víctor piensa que le está haciendo un gran favor a su amada; sin embargo, se juntan en una misma habitación sentimientos encontrados. Una mujer asustada con abstinencia y un chico que está perdiendo el norte.

Un fuerte contraste dramático entre un hombre que daría lo que fuera por vivir y no puede, y una mujer que pudiendo vivir busca desesperadamente su propio final. A partir de ese momento, descubrirán aspectos de sí mismos que creyeron inexistentes.