Al recibir facturas de cosas que nunca ha comprado, Michelle se entera de que una empleada de una inmobiliaria le ha robado su identidad y se hace pasar por ella. Connie Volkos se cambia incluso la cara para parecerse un poco más a Michelle.
Cuando Michelle descubre la estafa acude inmediatamente a la inmobiliaria, pero la estafadora ha huido. No solo ha cometido robos en su nombre, sino también asesinatos. Michelle entra en la cárcel por un crimen que no cometió. Querrá recuperar su vida, cueste lo que cueste.
Inspirada en la historia real de Michelle Brown, la película ha sido dirigida por Robert Dornhelm, quien ha dirigido entre otras películas Espartaco o Los diez mandamientos.