Antes de que Jet Li fuera elegido para el papel principal se ofreció el papel a Donnie Yen (Ip man, Blade II), pero este rechazó la propuesta debido que él no deseaba estar en secuelas o remakes de películas en las que ya habíaa trabajado.
Jet Li firmó un contrato para protagonizar la película por el que cobraría 12 millones de dólares.
El director invitó a Chuck Comisky, el supervisor de los efectos visuales de Avatar (2009), para que fuera el director del 3-D de los efectos especiales, trabajando con un equipo procedente de China, España, Corea, Singapur…