Crítica de SensaCine.com para ¡Vaya un fugitivo!: Piel de plátano que patina

Patrick "Pat" Proft, conocido sobre todo por la coescritura de los guiones de Hot Shots! o Agárralo como puedas, dirigió, escribió y produjo a finales de los noventa la única cinta que tiene en su haber tras las cámaras. Contó con el popular cómico Leslie Nielsen para encabezar el reparto de una trama que combina comedia y acción y en la que Nielsen se mete en la piel de Ryan Harrison, un avezado violinista que por imprevistos del destino es acusado de un asesinato que en realidad ha cometido un tipo que es tuerto, manco y cojo. Durante su camino a la prisión en una furgoneta policial, el vehículo tropezará con una piel de plátano que le permitirá a Harrison la huida y la búsqueda del verdadero culpable en una cuenta atrás de ochenta minutos.

¡Vaya un fugitivo! queda en una parodia no demasiado afortunada de algunos célebres thrillers, algunos de ellos interpretados por Harrison Ford, como El fugitivo o Peligro inminente. Hasta el propio cartel del filme de Proft imita en clave irónica y con brocha gorda al del filme de Andrew Davis. Precisamente es esa gruesa capa sobre la que pretende construirse su humor lo que no acaba de funcionar, además de unas cuantas irregularidades en el guión y algunas absurdas vueltas de tuerca a las que uno no acaba de sentirle la gracia.

A favor: La secuencia en la que Nielsen es perseguido por un tren (motivo visual del cartel del filme). Puede resultar entretenido tratar de detectar los guiños/referencias en clave paródica a otras películas.

En contra: Su "limitado" humor chorra. Si no conectas con él, te quedas totalmente fuera.