Crítica de SensaCine.com para De ladrón a policía: Una comedia insignificante

Les Mayfield se ganó una más que dudosa reputación como director con su primera película, El hombre de California, cuyo éxito le llevó a rodar un par de obras antes de acometer De ladrón a policía en 1999, película al servicio de su actor protagonista, Martin Lawrence. La trama es sencilla: un ladrón esconde un diamante antes de ser capturado; cuando sale de la cárcel descubre que el lugar en el que lo escondió es ahora una comisaría y debe pasarse pro policía para introducirse en ella. Y así, lo que tenemos es una comedia de enredo en la que Lawrence muestra su supuesta vis cómica acompasando el resto con acción.

La película no es nada más, ni nada menos. Un producto cortado a la medida del actor y en la que el director apenas hace algo más que situar la cámara delante de él y rodar las secuencias de acción con cierta profesionalidad para que el conjunto final no sea demasiado deleznable, logrando una película mediocre pero medianamente digerible si uno tiene el día alegre. No obstante, estamos ante una película que responde a un modelo muy establecido y extendido, acoplándose a este modelo de esquema que se repite una y otra vez dando siempre como resultado lo mismo. Y se sigue haciendo. Por algo será, suponemos.

A favor: Si te gusta el actor, Lawrence.

En contra: Si no te gusta el actor, Lawrence.