La película finaliza con una conversación telefónica "del más allá". Primero habla Claude Brasseur con su padre, Pierre Brasseur, y después el director Bertrand Blier con el suyo, el actor Bernard Blier. Se trata de un tributo final a los actores fallecidos.
Los protagonistas son algunos de los mejores actores de la historia del cine francés, que se interpretan a sí mismos. Destacan Jean-Paul Belmondo, Alain Delon, Gérard Depardieu, Michel Piccoli, Maria Schneider y Michel Serrault.
Nada más finalizar el rodaje, el director anunció la próxima realización de una versión femenina de la película. De momento, no se ha llevado a cabo.