La película está basada en la obra de teatro escrita por Cory Finley, quien también debuta como escritor y director en este filme.
Este es el último filme en el que ha participado Anton Yelchin, quien fallecía tras un accidente el 19 de junio de 2016 a los 27 años.
La producción de esta película estuvo paralizada durante dos años, pues se rodó entre junio y mayo de 2016, pero no ha visto la luz hasta 2018. Esto se debe a que durante 2017 estuvo circulando por distintos festivales.
Una de las escenas más importantes de la cinta está rodada tal y como hubiese sucedido en las tablas, con la cámara sin moverse, observando cómo actúan las dos protagonistas y con un momento crucial sucediendo fuera de plano.
A lo largo de 2017 el filme fue presentado en multitud de festivales -como el de Londres, Hamptons, Philadelphia o Sundance-, donde ha obtenido multitud de nominaciones, así como el Reel Social Club Indie Spirit Award dentro del Festival de Denver.