La cinta se ha rodado en Loftus Hall, una mansión en la península de Hook considerada una de las casas más encantadas de Irlanda.
Dado que los tres actores protagonistas son grandes nadadores, rodaron sus propias escenas de acción bajo el agua sin necesidad de emplear dobles.
David Bradley y Eugene Simon han sido personajes recurrentes en la serie Juego de Tronos. El primero daba vida a Walder Frey, mientras que el segundo encarnaba a Lancel Lannister.
El concepto de la película nace de una idea recurrente de David Turpin, quien imaginaba que los espíritus tomaban su casa una vez él se iba a dormir.