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    Muerte entre las flores
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    David Filme
    David Filme

    16.210 usuarios 262 críticas Sigue sus publicaciones

    4,0
    Publicada el 13 de agosto de 2021
    "Muerte Entre Las Flores" en un sorprendente y virtuoso Neo-noir, dirigido por Joel Coen y protagonizado por Gabriel Byrne. Tom es unos de los mejores personajes que han salido de la cabeza de los hermanos Coen. No es exactamente el clásico tipo duro, algo perdonavidas, se sirve de su inteligencia, de su portentosa visión global de las cosas. Gabriel Byrne le inyecta una mirada circunspecta, de una triste lucidez propia del que sabe que no se puede ganar en todo. Es un fatalista, frío en apariencia pero con su propio código de fidelidades. Muchas veces no sabemos que órgano usa para salir de un atolladero, si el cerebro o el corazón. Eso sí, no le gusta apretar el gatillo y nunca sale sin su característico sombrero Fedora. Su jefe, Leo, es un hombre de carácter que tiene la ciudad en un puño, pero que necesita de un cerebrito como Tom para que todo esté en orden. Leo da la oportunidad a Albert Finney de mostrar una interpretación robusta, férrea. El actor inglés más allá de la rudeza que se requiere, no rehuye el factor humano (incluso ingenuo) de este peculiar jefe de gánsters. Otro personaje luchará por el alma de Tom Reagan. Hablamos de Johnny Caspar (Jon Polito), un gánster italiano fanfarrón y peligroso que, contradictoriamente siempre recurre a la "ética" en sus argumentaciones. La guerra entre ambos hará que viejas amistades se tambaleen y se formen incómodas alianzas. Y es que, en el film, hay unos cuantos motivos para llegar a este desencuentro.

    Caspar quiere acabar con Bernie Bernbaum (John Turturro), un estafador que está reventando sus negocios de tongos boxísticos, así que anuncia a su rival (Leo) que lo va a liquidar. Sin embargo, Leo tiene por novia a Verna (Marcia Gay Harden) la hermana de Bernie y ésta exige que lo proteja. La tensión va subiendo hasta el límite de la guerra de bandas. Tom aconseja a Leo que no proteja a Bernie, porque la guerra no beneficia a nadie, además Bernie es un tipo de moral entre escasa e inexistente, interpretado por un excesivo y eficiente John Turturro. Leo, no obstante, se aferra a su amor por Verna y desoye a Tom. En este punto, Tom toma una decisión drástica que le hará alejarse de su amigo Leo y acercarse a Caspar. Y es que, para complicarlo todo, Tom tiene una relación secreta con Verna. En esta encrucijada Tom deberá sopesar por qué guiarse, si por su amistad con Leo o por su amor (pasión sería más apropiado) por Verna. Y es que, más allá de las venganzas, asesinatos y tiroteos, la cinta nos habla de las relaciones humanas puestas al límite, y sobre los inevitables sacrificios que tenemos que hacer en nombre de ellas. No nos extrañe ver en la película una semblanza extrañamente humana, y melancólica, de personajes acostumbrados a la crueldad y el crimen. Si bien la revisión posmoderna suele ser una característica relativamente común en los hermanos Coen, hay un profundo respeto por las películas clásicas de gánsters. Median varias décadas, pero en este filme, se pueden ver trazas de las películas de Wellman, Hawks o Walsh. Y evidentemente las influencias también llegan desde el punto de vista literario, siendo la más visible Dashiell Hammett. Los magníficos diálogos tienen su esencia cortante, cínica e ingeniosa. Podría ser la película de los hermanos Coen mejor dialogada.

    Eso sí la escritura del guión casi acaba con su cordura debido al bloqueo del escritor, hecho que reflejarán en Barton Fink (1991). Todo ello no quiere decir que en cada momento siga las consignas del cine de los años 30 o 40. No puede faltar el característico humor de los Coen en personajes como el hijo de Caspar o en detalles como cierta escena donde se roba un peluquín. Los hermanos Coen no se conformaron con transfundir la sangre de películas clásicas a las coordenadas de principios de los noventa, sino que crearon su propio mundo inspirados por un amor cinéfilo hacia el cine clásico norteamericano. Desde el punto de vista se sensorial, el film es un auténtico deleite. La ambientación de la época es minuciosa y detallista, cortesía de una estupenda dirección artística. La magnífica fotografía de Barry Sonnefeld tiene un sentido otoñal, sobrio y melancólico que contribuye al ambiente crepuscular y algo decadente de la película. La música de Carter Burwell se mueve en idénticas coordenadas añadiendo lirismo y belleza a un film que en la parte técnica es irreprochable. Las escenas situadas en los bosques, aparte de intensas, tienen un aspecto serenamente vistoso, casi fatalista. Si mezclamos esta delicia técnica con la inevitable violencia que hace acto de presencia durante la cinta, el resultado no puede ni más estimulante, ni más emocionante.

    Las actuaciones son soberbias, Gabriel Byrne está brillante en el papel de Tom Reagan, realiza una de las mejores interpretaciones de su carrera, encarnando a un hombre que se desenvuelve como pez en al agua cuando está entre la espada y la pared. Marcia Gay Harden convincente en su tarea como Verna Bernbaum, la mujer en disputa cuyo estafador hermano complicará más las cosas. Albert Finney es Leo O'Bannion, un duro irlandés que comanda con puño de hierro un imperio del crimen. Mientras que Jon Polito encarna a Johnny Casar, su adversario italiano asesorado por un taimado personaje al que apodan el danés. Y por último John Turturro logra también una de sus mejoras actuaciones como
    Bernie Bernbaum, el fullero hermano judío que amaña combates de boxeo perjudicando los intereses de este último (Johnny Casar). En el reparto también tendrán una breve aparición Steve Buscemi, en el papel de Mink Larouie, corta interpretación como el corredor de apuestas que juega a dos bandas tanto en los negocios como en lo sentimental y monumental. Sam Raimi es Snickering Gunman y para finalizar Frances McDormand como secretaría del alcalde. La sucesión de diálogos rápidos, incisivos y altamente ácidos empieza desde el primer minuto y le dan un gran ritmo a la película.

    En definitiva, un sorprendente Neo-noir que esconde tras su virtuosismo y la trama criminal un reflejo sobre las alternativas morales, la fidelidad a los códigos personales y las relaciones humanas en situaciones extremas. Es mordaz o lírica cuando quiere, y se imbuye de clasicismo sin soslayar la particular y audaz visión de los hermanos Coen. La brillantez de su puesta en escena, la excelencia de un guión muy elaborado, diálogos espectaculares y sus estupendas interpretaciones la hacen imprescindible. Probablemente, el mejor film de los Coen.

    FilmeClub.com
    Adrianrom 1977
    Adrianrom 1977

    911 usuarios 436 críticas Sigue sus publicaciones

    4,0
    Publicada el 27 de julio de 2022
    Los Hermanos Coen dirigen y guionisan su terceras entrega cinematográfica, y en base su variada filmografia esta vez nos traen una gran película de gangsters el la época de la ley seca.
    La trama narra la historia de Tom Reagan un asesor de un jefe de la mafia llamado Leo en la época de la ley seca, luego de varias traiciones y peleas entre su mafia y la de Gaspar otro jefe de una mafia, Tom se dividirá entre las dos mafias causando una división de lealtades.
    Buenísima fotografía, buena banda sonora, y grandiosas interpretaciones, pero muy lenta y tediosa pero aún así los giros de trama y la acción por doquier hacen de la pelicula una gran peli de gangsters y una gran peli de los hermanos Coen.
    cine
    Un visitante
    4,5
    Publicada el 28 de diciembre de 2020
    Es la primera y única película de gangsters de los Coen. Los directores reviven el cine negro y reviven a aquellos personajes de los años 40 y 50, eso si con un toque de comedia.

    Joel y Ethan juegan con el espectador haciendo que Tom, el prota se cambie de bando en la pelea entre dos familias.

    El sombrero de Tom apelando a interpretaciones, a pesar de ser un (mcafin), Tom no deja de perseguirlo nunca. Puede que sea su dignidad, ya que siempre que no lo lleva puesto se ve que no tiene la situación controlada
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