Crítica de SensaCine.com para Matrimonio de conveniencia: Secretos de matrimonio

No es ningún secreto que Peter Weir produjo, escribió y dirigió su primera comedia romántica, 'Matrimonio de conveniencia', como un vehículo para el lucimiento de Gérard Depardieu y una manera de propulsar su fama entre el público anglosajón. Si bien consiguió ese objetivo de sobra, lo cierto es que probablemente estemos ante uno de los puntos más flojos de la carrera cinematográfica del australiano, que no consigue llevar la relación entre el actor francés y Andie MacDowell más allá de las previsibles confusiones y choques de personalidad derivadas de un matrimonio de conveniencia que los junta y obliga a convivir para engañar a los encargados de inmigración.

No obstante, aunque el desarrollo y, ante todo, el desenlace se vean aquejados de la previsibilidad más absoluta, Weir mantiene algunos momentos de genio a la hora de retratar ambientes y dotar a sus personajes de una profundidad humana que va más allá de los arquetipos modelados por Hollywood. Sin embargo, eso y la sensibilidad visual solamente elevan a 'Matrimonio por conveniencia' unos pequeños palmos por encima del grueso de comedias románticas de los años 90. Habrá quienes consideren que ya es suficiente, pero, desde luego, las aportaciones de Weir han sido más decisivas en muchos otros géneros.

A favor: La preocupación de Peter Weir por dar trasfondo profesional e intereses a los dos personajes por igual.

En contra: Tratándose del excelente director australiano, podría haber dado más de sí.