Pistolero

Ben Kane es un hombre amante de la paz y el entendimiento que, pese a todo, toma el trabajo de sheriff en la localidad de Lordsburg. Lo que ocurre es que Ben tiene una pequeña cuenta que saldar con el matón local, Frank Boone, y no quiere desaprovechar la oportunidad de justar cuentas con el hombre que asesinó a su hijo. Consigue la ayuda de Billy Young, un pistolero a quien su compañero dejó tirado después de matar a un general mexicano. Ben se enamora de Lily, una bailarina del pueblo y, cuando los forajidos John Behan y Jesse Boone (antiguo compañero de Billy e hijo de Frank) es ella quien lo alerta. Kane consigue arrestar a Jesse y, cuando descubre su identidad, no duda en utilizarlo para atraer a su padre y así poder completar su propósito inicial de vengarse del asesino de su propio hijo.