La nueva sexualidad
por Rodolfo SánchezTras su larga trayectoria en el teatro, Gerardo Vera debutó en la dirección en 1992 con Una mujer bajo la lluvia para, siete años después, rodar su tercer largometraje, Segunda piel, obra que guarda ciertas relaciones con aquella aunque abandone el tono de comedia que tenía su primera película.
Segunda piel es un drama desaforado sobre un trío amoroso imposible en el que aparece la homosexualidad y cierta idea de la libertad sexual de manera explícita, muy directa, sin caer, o no hacerlo de manera constante, en lo desaforado. Gracias a un guion bastante interesante aunque con una pérdida paulatina de interés según avanza la película que ocasiona un enorme desequilibrio entre lo propuesto y lo ofrecido finalmente, unos actores correctos en su papel –excepto Jordi Mollá, siempre excesivo e insuficiente- y una dirección convencional pero efectiva, Vera saca hacia delante su mejor película, a pesar de que no vaya más allá de la corrección formal y narrativa.
A favor: Los actores y la primera parte.
En contra: Que al final queda todo en simple anécdota y la supuesta incisión sobre varios temas se pierde por el camino.