Crítica de SensaCine.com para El espantatiburones: Aventuras en el mar

Dirigida por tres de los directores más carismáticos de la animación de DreamWorks, Bibo Bergeron, Viky Jenson y Rob Letterman, El Espantatiburones es posiblemente la peor película de animación de la compañía de largo. Si bien es cierto que la DreamWorks ha experimentado éxitos notables de cara a la taquilla, también lo es que sus apuestas, frente a la Pixar, su gran competidora de estos años, no tienen demasiado que hacer. No se trata de una cuestión formal, técnica, en este sentido ambas son magníficas (la Píxar posiblemente está por encima también en esto) pero la complejidad de las propuestas de la DreamWorks es francamente inferior.

En ambos casos estamos ante productos dirigidos a un público joven (ya no solo infantil) pero la DreamWorks tiende a una planicie que, como en El Espantatiburones, en ocasiones, roza una simplicidad que sonroja. Se trata de una película visualmente brillante, pero la vacuidad de la narración, la falta de gracia en general y los números musicales (bastante insoportables en general) hacen de esta película un producto mediocre y, lo que es imperdonable, aburridísimo.

A favor: La factura de sus imágenes.

En contra: Lo simplista que es incluso siendo para niños (o precisamente por ello).