La pequeña pícara

La última vez que John Hughes dirigió uno de sus guiones prosiguió el camino que había llevado hacia una deriva cada vez más sentimental y de cine familiar. Afortunadamente, el autor de 'El club de los cinco' todavía conservaba su capacidad para dar profundidad a los personajes a través de los diálogos, pero la sucesión de situaciones dramáticas a las que somete a la joven protagonista de 'La pequeña pícara', criada por un vagabundo (James Belushi) y luego recogida por una abogada acaudalada (Kelly Lynch), mantiene al relato bordeando siempre al filo del registro lacrimógeno más inaguantable.Hay algún que otro gag visual digno de regocijo y vinculado al slapstick si Belushi está de por medio, pero el tono de desbordado humanismo y crítica social sotto voce terminan pesando más que cualquier intencionalidad cómica. Esto es especialmente dañino durante la última media hora del filme, que c