Salomé

Aida Gómez está preparándose para un nuevo ballet. Día a día se preparan las coreografías, la música, el decorado y van tomando forma ... De repente, nos topamos con una figura en una silla de ruedas ... Este es Herodes, Tetrarca de Galilea.

Lo único que quiere Herodes es que su hija baile para él, y lo conseguirá sea cual sea el precio. Salomé se niega, no quiere que la miren otros ojos que no sean los de una joven apuesto llamado el Bautista. Pero cuando ve el caso omiso de sus intentos de seducción, este, lleno de rabia, realiza una danza sensual y poco modesta por su padrastro.

Herodes se acerca, victorioso, pero la petición de la joven le deja petrificado: Salomé quiere la cabeza de Juan El Bautista.