Crítica de SensaCine.com para Thumbsucker: Chuparse el dedo

El título es muy gráfico. 'Thumbsucker'. Chuparse el dedo. Es tanto la tara psicológica del adolescente protagonista como el perfil psicológico de la mayoría de los protagonistas, unos individuos que se niegan a crecer, a aceptar responsabilidades y que incluso, como mecanismo de defensa, parecen regresar aún más a la infancia.

Siguiendo a pies juntillas muchos de los mandamientos indies, como esa fotografía de colores desgastados, esas tramas corales y esos repartos llenos de caras conocidas, siempre como secundarios, el director de videoclips Mike Mills debuta en la ficción con un retrato desencantado sobre la juventud urbana, sobre su falta de objetivos vitales y, claro, sobre chuparse el dedo. Se puede entender cierta laxitud o dejadez de la película como una posición estética, una forma de definir el sentir de sus protagonistas, pero al mismo tiempo, decepciona que el director parece no tener nada más que ofrecer y se limita a seguir una plantilla que hemos visto demasiadas veces. Una encarnación más del cine independiente donde solo cambian algunas líneas del guión y el rostro de sus actores.

A favor: Correcta en todos sus apartados...

En contra: ... pero de esa corrección que muchas veces resulta molesta.