Crítica de SensaCine.com para Rústicos en Dinerolandia: Gente de campo

Una Penelope Spheeris crecida y salida de la exitosa Wayne's world: ¡qué desparrame!, cima de la comedia absurda de los años noventa, se enroló en esta versión de un producto televisivo, una serie de los sesenta y setenta titulada Los nuevos ricos. Esta adaptación a la pantalla grande, fiel en líneas generales con la salvedad de un humor grosero y deliberadamente escatológico del que carecía la serie original, sigue las peripecias de una familia de rednecks analfabetos que, de la noche a la mañana, se convierten en millonarios al encontrar petróleo en sus tierras. Para disfrutar de su nueva condición de multimillonarios, se trasladan a vivir en una mansión de Beverly Hills.

Deliberadamente trash pero sorprendentemente bien rodada y explicada, Rústicos en dinerolandia solo puede ser disfrutada por los fundamentalistas de las comedia americana más grotesca. Dicho esto, es de justicia reconocer el gran plantel de actores del que se sirve Spheeris: Dabney Coleman, Cloris Leachman, Lily Tomlin y Lea Thompson, entre otros, brillan es su faceta más cómica y desenfadada.

A favor: Erika Eleniak, tronchante como redneck crecidita-adolescente

En contra: su falta de clase