Vikingos: episodios de la temporada 4

 

 

 

 

 

 

El Rey Ecbert centra sus esfuerzos, en Inglaterra, en asegurarse la corona de Mercia. En las afueras de parís, una fuerza considerable de Vikingos ataca las defensas de Rollo. Por su parte, Harbard, el misterioso errante, regresa al pueblo de Kattegat. Allí, el vagabundo causa una gran excitación entre las mujeres.

 

 

 

 

 

 

 

 

La muerte de Ragnar ha supuesto un cambio terrible en la esfera de los Vikingos. Lagertha, en Noruega, y Aethelwulf, en Wessex, meditan sobre el futuro tras este hecho. Mientras tanto, los hijos de Ragnar planean su venganza. Lagertha ordena que se construyan defensas en Kattegat. Ivar decide retar a Lagertha. Mientras tanto, Bjorn y Rollo llegan a España.

Ubbe, Sigurd e Ivan siguen planeando para consumar su venganza por la muerte de su padre. Para ello, deciden formar el ejército más numeroso posible. Rollo ofrece tierras en Normandía a cualquier guerrero dispuesto a luchar. Por su parte, Judith visita a su padre en Northumbria para intentar convencerle de una alianza con el Rey Ecbert. Este último, a su vez, adiestra a su hijo para que se convierta en el próximo monarca.

El ejército se está formando, pero deben decidir un líder. Bjorn e Ivar pretenden ocupar ese puesto. Sin embargo, la vacante solo estará disponible para uno. Harald ve a la mujer de la que se había enamorado, y recibe noticias sobre su situación actual. Aethelwulf discute con Ecbert y una boda se celebra finalmente, aunque con un trato de por medio.

Kattegat recibe el ataque de Egil y sus hombres. Esta ofensiva, sin embargo, no resultará provechosa para Egil, que será capturado y tendrá un diálogo con Lagertha. En Mercia, los perdones aparentes pero con intenciones subyacentes están a la orden del día. Esto provocará una serie de catastróficas consecuencias. Tanaruz pretende huir de Helga, pero Floki intentará persuadirla para regresar. Mientras tanto, el bando vikingo se prepara para su próxima batalla.

La batalla entre los sajones y los vikingos continua. Las grandes pérdidas que sufre el primer bando provocarán que sus oponentes avancen con mayor determinación. Cuando su derrota sea evidente, el destino de personajes como el Rey Ecbert; Edmund o, incluso, algún miembro de los Vikingos estará más en peligro que nunca.