Opiniones Hollywood

Hollywood es una historia alternativa sobre un elenco de luchadores, en su mayoría ficticios, que intentan triunfar en Los Ángeles en los años 40.

Casi todos los miembros del reparto que nos presentan - el escritor Archie Coleman (Jeremy Pope), el director Raymond Ainsley (Darren Criss), la actriz Camille Washington (Laura Harrier), entre otros - son de orígenes marginales.
Son, por designio, personas que nunca, jamás, habrían tenido una oportunidad en el Viejo Hollywood, al menos no sin encontrar alguna forma de pasar. Este es el primer objetivo del espectáculo: una reescritura de la trillada historia del sueño grande, pero una protagonizada por personas a las que no se les permitió formar parte de ella, pero que en esta, ganan...

Pero la serie no es sólo una fábula rosa sobre qué pasaría si... Hollywood también tiene la ambición de ser un correctivo muy necesario para nuestra visión demasiado simplista de lo que fue en su día.

Este Hollywood no fue para el consumo de masas, un "Dreamland" donde las grandes estrellas tenían conexiones arregladas por arregladores, que hacían negocios en el frente de una gasolinera y los actores, productores gay y bisexuales, secretamente hacían fiestas exclusivas donde ya no podían ser secretos.

Hollywood muestra su época mas turbia - la homofobia, el racismo y el sexismo que dejó fuera al talento marginado durante décadas - y sueña un nuevo sueño donde no fue suficiente para detener a nuestros héroes.

Pero su otro objetivo de desengañar a los espectadores del mito sano que encarnan las películas de la época se vuelve increíblemente desordenado rápidamente.

Parte del problema es que Hollywood no está completamente construido alrededor de personajes de ficción. Los nombres reales entran y salen del drama a lo largo de todo, desde Hattie McDaniel (Queen Latifah), hasta Anna May Wong (Michelle Krusiec), personas reales que hicieron el imposible para reforzar los egos de personajes que nunca existieron y por lo tanto, discutiblemente, sus creadores.

Luego está Henry Wilson(Jim Parsons), un agente de talentos de la vida real que fue famoso por desarrollar a los protagonistas de la época.
El era, como Hollywood deja excesivamente claro, el Harvey Weinstein de su época, coaccionando a los jóvenes a tener sexo a cambio de papeles y el estrellato. En el programa, uno de esos hombres es el aspirante a actor que Wilson convierte en Rock Hudson.

Es difícil no ver las ambiciones de Hollywood.
La verdad de su lado más desagradable, inspirada en la versión real de la historia, socava la seriedad de su deseo, haciéndola parecer empalagosa. A su vez, esa parte sincera del espectáculo hace que sus incursiones en los bajos fondos del mundo real del viejo Hollywood, parezcan baratas.
Hay demasiadas fricciones entre los dos para construir un todo cohesivo, y, como resultado, toda la empresa se ve comprometida en el mejor de los casos y condescendiente en el peor.

Como la mayoría de las personas involucradas en el Hollywood del mundo real, los personajes de Hollywood están totalmente convencidos de que todo lo que hacen es muy importante.

Hacen realidad los sueños, contando historias para que otros puedan verlas y se inspiren para creer que ellos también pueden hacerlo. Necesitamos tener una versión de esta historia en la que los marginados tengan éxito porque necesitamos que inspiren una versión futura más diversa de Hollywood,para que Hollywood pueda seguir adelante.

Pero la serie también quiere que sepan que representa un negocio en el que los abusadores prosperan, el sexo puede cambiarse por el poder y los hombres intolerantes pueden construir sistemas que protejan sus intereses y amplíen su alcance.

Eso es tan parte del negocio del espectáculo como el chico negro que se le mete en la cabeza que puede lograrlo, importa tanto como los blancos, y se convierte en un ejemplo que inspira a muchos otros en casa. Es revelador que mientras los personajes marginados de Hollywood encuentran el éxito, su mayor abusador es reformado ambiguamente, se le permite permanecer en el negocio de los sueños después de sólo unas pocas escenas de sentir lástima por todo ello.

Estas son dos caras de la misma moneda: el pernicioso alcance de los poderosos y las inspiradoras historias de éxito que lavan su reputación. Al atar los dos juntos una vez más, la serie apoya el viejo sistema que cree que la mayor producción de Hollywood, siempre ha sido Hollywood...

Realmente es una serie muy buena, porque nos muestra un lado que realmente las personas de hoy en día no conocíamos de Hollywood, pensamos que siempre ha sido lo perfecto que nos muestran los demás Pero en realidad para haber logrado lo que hoy en día tenemos del cine se tuvieron que pasar por muchas cosas y esta serie lo demuestra como el racismo, la homofobia y el feminismo que es algo muy admirable que normalmente Ryan Murphy nos muestra en sus trabajos.