Shark: episodios de la temporada 1

Después del desenlace fatal de uno de sus casos y de sufrir una crisis de culpabilidad, Sebastian Stark, el abogado más temido de Los Ángeles, decide aceptar la oferta que le brindó el alcalde y trabajar para la oficina del fiscal. El nuevo puesto parece un reto interesante para él, pero no resultará tan sencillo. La condición: entrenar a un peculiar grupo de novatos deseosos de ganar todos los casos que se les presenten.

Stark debe encerrar al asesino de un policía de la brigada antidroga que trabajaba infiltrado. EL fiscal deberá trabajar mano a mano con los compañeros del policía asesinado, quienes dudan de su confianza y sus buenas intenciones después de haber usado sus tretas para defender a sus clientes cuando era abogado defensor

Doctor Malo. La esposa de un cirujano lleva desaparecida tres días y Shark sospecha que fue el marido quien cometió el crimen, pero no tiene ninguna prueba para procesarle. Shark, en contra de la opinión de varios miembros de su equipo, no duda en ponerse en contacto con el hijo de la pareja Ethan, de tan sólo ocho años, para comprobar si éste puede conducirle a alguna pista. Mientras, Julie acepta que Rachel se quede a dormir en casa con su padre. Sin embargo, llega la noche y su Shark no aparece.

Russo. Los cuerpos sin vida de una pareja aparecen en una playa de Malibu. Ambos habían alquilado una casa a un investigador privado conocedor de los secretos más oscuros de algunas personas de Hollywood, entre ellas de Shark. El abogado trabajará junto con la policía local para conseguir información sobre este hombre, ya que en él están centradas todas sus sospechas. Mientras, Julie decide ayudar a un compañero y dejar de lado sus propios estudios.

Al alcance de la mano. Stark y su equipo aceptan un caso de violación protagonizado por una joven, que afirma haber sido agredida por tres atletas del equipo de la facultad en una fiesta universitaria. Sin embargo, Madeline duda del testimonio de la chica y Shark comienza a creer a su compañera cuando descubre que la muchacha había mantenido una relación con uno de los tres deportistas a los que acusaba. La joven les pide una oportunidad y el equipo continúa en el caso para esclarecer la verdad. Mientras, Julie pide ayuda a su padre ya que le han suspendido una asignatura acusándola de copiar en uno de los exámenes.

Juicio contra la moda. Cuatro mujeres latinas aparecen muertas en un almacén de ropa incendiado y la policía declara que se trata de un accidente. Sin embargo, el alcalde de Los Ángeles, también latino, filtra falsa información a la prensa para forzar a la oficina del fiscal a investigar el caso en profundidad. Shark no está de acuerdo con la situación y advierte que van a perder el caso, pero enseguida cambia de opinión cuando se entera de quién es el abogado defensor del almacén de ropa contra el que se enfrentan. Julie, por su parte, ve cómo mejoran sus problemas en la escuela.

Recuerdos del pasado. Después de que una niña de 8 años fuera raptada en un parque y posteriormente asesinada, Shark cree que el caso puede estar relacionado con otro similar ocurrido 15 años atrás. En el caso anterior, el principal sospechoso, Charlie Davis, fue defendido por el propio Shark y Jessica Devlin fue la encargada de llevar a cabo la acusación, por la que finalmente se declaró al sospechoso culpable de asesinato. Shark continúa defendiendo la inocencia de Davis, idea que se refuerza cuando hallan a otro sospechoso al que se sitúa en ambas escenas. Jessica, por su parte, no está de acuerdo con Shark en remover el caso anterior, quizás porque hay datos que podrían poner en peligro su carrera y que ella desea ocultar. Por otro lado, un joven le cuenta a Julie que su padre tuvo una aventura con su madre cuando ésta estaba casada con Shark.

Triángulo amoroso. Una chica de color de 16 años de edad es atropellada por un vehículo justo después de salir de una fiesta. La escuela en la que la víctima estudiaba gracias a una beca es considerada una de las más caras de la ciudad y a ella acudían chicos blancos, incluida la hija de Shark, Julie, que también se encontraba en la fiesta. Shark teme que se desate una guerra racial después del terrible crimen pero, durante el desarrollo de la investigación, otros puntos revelan un importante giro en la historia que se aleja del móvil racial. Por otra parte, Isaak, el policía que estuvo implicado en la muerte de su compañero, es contratado por Shark para formar parte de su equipo como investigador. La bienvenida por parte de Raina no será muy calurosa.

Asesino a sueldo. El fiscal del distrito adjunto Dean Gorman aparece muerto a causa de heridas de bala junto al cuerpo de una prostituta de lujo en el coche de ésta. Las investigaciones señalan que la víctima quería dar un gran paso en su carrera y llevar casos que estuvieran relacionados con el tráfico de drogas. Las sospechas apuntan a que la prostituta había accedido a dar información a Gorman sobre un importante traficante de droga a cambio de que el fiscal retirara sus antecedentes. Mientras, Julie piensa dar un paso más con Eddie.

Los pecados de una madre. Una conocida de alto nivel social y madre de una de las mejores amigas de Julie dispara a su ex amante y declara haberlo hecho en defensa propia. Shark sospecha que la mujer miente y afirma que tiene un lado oscuro, por lo que investiga qué clase de relación exactamente tenía ésta con la víctima y qué condujo a una mujer con una situación social tan envidiable a relacionarse con un traficante. Por otro lado, Shark retira la palabra a su hija porque ha pasado la noche con Eddie.

El mundo de Wayne. El nuevo caso de Shark parece el más fácil al que ha tenido que hacer frente a simple vista. Wayne, un profesor de universidad, es declarado sospechoso del asesinato de cinco mujeres y del intento de acabar con la vida de la que hubiese sido su sexta víctima, que logró escapar. El caso se complica cuando el acusado manifiesta su deseo de representarse a sí mismo en el juicio y el equipo de Shark advierte que todo lo que sabe sobre Derecho lo ha aprendido del brillante fiscal al que se enfrenta. Shark se viene abajo cuando la sexta víctima se niega a ser interrogada por su agresor.

Fiebre de estrella. Taylor Mays, una de las estrellas más jóvenes de Hollywood, muere tras salirse de la carretera empujada por otro vehículo. En el momento del suceso, la actriz le dejaba un mensaje a su hermana en el que confesaba que había finalizado su relación con un misterioso chico. Shark sospecha que fue el acoso de los paparazzi lo que acabó con la vida de la joven y busca al culpable del horrible crimen. Tras publicarse unas fotos en las que la actriz yace muerta en su vehículo, el equipo del fiscal descubre la identidad del fotógrafo que las vendió y le interrogan, pero el joven les ofrece datos relevantes que alejan de él toda sospecha. Mientras, Julie acude a una fiesta en Hollywwod con su guardaespaldas sin el consentimiento de su padre.

Aquí viene el juez. La esposa de un juez conocido por sus duras condenas y por haber increpado en varias ocasiones a Shark, es asesinada en el interior de su vehículo. El móvil parece haber sido el robo, pero el juez se convierte en el principal sospechoso para Shark cuando se entera de que su matrimonio estaba atravesando una grave crisis. El juez estaba a punto de ingresar en la Corte Federal de Apelaciones y no quería que ningún escándalo enturbiase su nombramiento. Shark decide asumir el riesgo y acusarlo directamente del homicidio de su esposa arrestándolo en mitad de un juicio. Mientras, Julie planea preparar una cena para despedir a Neal cuando se entera de que éste ya no va a ser su guardaespaldas.

Chris Chambers, el mejor amigo de Shark, le pide que acuda al ático de un hotel donde se ha celebrado la fiesta de su empresa. En la habitación, Shark halla el cuerpo sin vida de una mujer y Chambers le explica que no ha tenido nada que ver con la muerte, que simplemente regresaba a por su abrigo cuando la encontró. El fiscal borra las huellas de su amigo y tratan de ocultar lo ocurrido, pero el cadáver aparece en otro lugar al día siguiente. El primer sospechoso es Ben Melvin, un artista conocido por su afición al éxtasis y la ketamina, drogas encontradas en el cadáver. Este planteamiento pierde fuerza cuando Shark descubre pruebas que incriminan a su amigo Chambers y a su socio Stafford en el asesinato. El fiscal se convierte en víctima de una trampa que hará peligrar su carrera cuando recibe un vídeo que le sitúa en la escena del crimen. Mientras, Julie trata de reunir fuerzas para contarle a su padre que fue arrestada por conducir ebria.

Un tiroteo en el que están implicados dos policías se cobra la vida de Thomas Broussard, un adolescente de raza negra que se encontraba en un coche con su primo, Reshaun Ferris, conocido en la Policía por sus trapicheos con las drogas. Shark cuenta con un vídeo que incrimina al traficante, pero nuevas pruebas complican el caso y dan un gran giro a la investigación. El resultado de las pistas pone en una difícil situación a Isaak, que tendrá que actuar de intermediario entre la policía y la oficina del fiscal y se planteará renunciar a su trabajo como detective. Por otro lado, la relación entre el ex policía y Raina cada vez se complica más y Julie acude le pide a su padre que la ayude a buscar un abogado que lleve su caso en los tribunales.

Juicio con fuego. Mientras Shark y Raina están en medio de un juicio en el que se juzga a un asesino múltiple apodado Masters, otro detenido acusado de robar en un supermercado entra en la sala y toma a varios rehenes que no consiguen escapar a tiempo. Stanley, el acusado, pide a la policía que se borre su expediente y le dejen libre de cargos afirmando que no tuvo nada que ver en aquel robo. El equipo del fiscal trabaja rápidamente para descubrir qué ocurrió exactamente en el supermercado. El caso se complica cuando la única testigo es hallada muerta y Stanley le quita a Masters las esposas.

Shark debe presentar cargos contra el encargado de un hogar de acogida para mujeres que afirma haber matado a Shaw, un productor de películas porno que maltrataba a las actrices. El sospechoso, Brent Gilroy, es presentado por su abogado ante la prensa como un héroe que ha acabado con la pesadilla de muchas mujeres. El caso se complica cuando aparece otra implicada, Katie Paget, protagonista de varias cintas que nunca vieron la luz y relacionada sentimentalmente con el acusado. Por otro lado, Shark no da el visto bueno a Megan, la nueva amiga de su hija, después de encontrar marihuana en su habitación y sus nuevas y provocativas prendas en el armario. Isaak se sincera con Raina y le confiesa sus sentimientos.

Caída en las desgracias. Shark debe encontrar al culpable del asesinato de Victor Burke, un profesor de universidad experto en informática que fue arrojado por un balcón. El primer sospechoso es Cole, el ex novio de la mujer de Burke y un joven adicto al juego que debía mucho dinero a los hermanos Lundy, perseguidos y espiados por la oficina del fiscal desde hacía dos años y sospechosos de cometer crimen organizado. Tras reunir varias pistas, Shark descubre que Cole y Burke trabajaban para los Lundy haciendo uso de la inteligencia y capacidad para la informática de la víctima, que planeaba reunir suficiente dinero para pagar la operación de su hija pequeña.

Amistades peligrosas. Jackie Buckner, un niño de 11 años, es hallado en casa de un hombre llamado Russell Wallace tras 4 años desaparecido. El hombre, que le había cuidado durante ese tiempo, es acusado de raptar al chico, pero éste no colabora con los fiscales para demostrarlo. En el juicio, la abogada de Wallace saca a la luz posibles daños por parte de los padres y alega que su defendido se limitó a proteger al niño de su propia familia. El tema se complica cuando el niño se fuga de su verdadero hogar. Por otro lado, Jess le pide a Shark que hable con el alcalde para conseguir su apoyo y salir reelegida como fiscal del distrito.

La venganza del tiburón. Wayne Callison, el supuesto asesino al que Sebastian no pudo condenar, ha vuelto de nuevo a cometer un crimen. El equipo trabaja sobre las pistas para atraparle esta vez, pero Callison, que vuelve a defenderse a sí mismo en el juicio, no se lo pone nada fácil. La víctima, Hannah Morton, cuenta con el mismo perfil que las otras chicas, pero el comportamiento de Shark en el juicio lo aleja del caso. Jessica, que no ha salido reelegida como fiscal del distrito, es la candidata perfecta para poner a Callison entre rejas.