Hijo del productor Lee Stanley, se convirtió en la persona más joven en conseguir un premio Emmy por producción cuando lo ganó a los 16 años por el documental de televisión "Desperate Passage" en 1987. En un principio fue campeón de carreras de motocross y se pasó a la producción de cine como asistente de producción donde aprendió todas las facetas del negocio del cine para después convertirse en vise presidente de Sheen/Michaels Entertainment a mediados de los 90 y trabajar con el actor Charlie Sheen y el cantante de Poison Bret Michaels en varios proyectos cinematográficos.