Críticas
1,5
Mala
La letra escarlata

Credos intolerantes

por Bibi Ramos

Partiendo de la novela homónima del norteamericano Nathaniel Hawthorne, aunque adaptándola muy libremente, el realizador londinense Roland Joffé llevó a la gran pantalla La letra escarlata, pocos años después de los éxitos cosechados por La misión y La ciudad de la alegría. Joffé vuelve a demostrar que la recreación de épocas y escenarios es uno de sus puntos fuertes, pero no tanto la construcción de personajes y el control del ritmo narrativo, no sabiendo combinar bien en este guión el apartado romántico y la intrusión india.

La letra escarlata discurre en la Massachussets colonial de finales del siglo XVII, lugar y tiempo donde también transcurría El crisol, filme de un año después. La película de Joffé nos presenta a una inglesa católica recién llegada a esa comunidad donde acabará siendo objeto y víctima de las diferencias ideológicas y de costumbres. Demi Moore resulta poco creíble y afectada en el papel protagónico. Todo lo contrario que su "partenaire" masculino, un atractivo Gary Oldman, en el que reside casi íntegramente la fuerza e interés de este filme. Las escenas tórridas, como era de esperar, tampoco son para tanto. El filme acaba reducido a simple vehículo de lucimiento de sus dos estrellas, por entonces, y su larga duración no contribuye tampoco a mejorar el conjunto.

A favor: La dirección artística y la actuación de Oldman.

En contra: La interpretación de Demi Moore, la previsibilidad de la historia y el poco atinado ritmo narrativo.