Críticas
4,0
Muy buena
Nicky, la aprendiz de bruja

La bruja mensajera

por Diana Albizu

El cuarto largometraje producido por el estudio Ghibli, justo después de obras maestras como 'Mi vecino Totoro' (Hayao Miyazaki, 1988) y 'La tumba de las luciérnagas' (Isao Takahara, 1988) ha sido ensombrecido por la fama de dichas obras anteriores en su paso a la Historia, pero en realidad se trata de una de las películas más bellas y duras de la filmografía de Miyazaki. Siempre fiel a su intención de hacer filmes de animación entretenidos y educativos para el público infantil que también suponen un goce estético y narrativo importante para los adultos, el autor de 'Nausicaä del Valle del Viento' (1984) tomó como base un libro de Eiko Kadono sobre una brujita adolescente que trabaja como mensajera aérea y añadió numerosos cambios convirtiendo la historia en algo mucho más trascendente que un relato de iniciación y entrada en la edad adulta.

Al cumplir 13 años, la protagonista Nicky (Kiki en versión original) debe abandonar la casa de sus padres para ganarse la vida como bruja en otro pueblo. Con hermosos diseños inspirados en la arquitectura del norte de Europa (principalmente Estocolmo) y una particular ambientación temporal a caballo entre los años 40 e inicios de los 60, Miyazaki cuenta las dificultades con las que se encuentra Nicky en una ciudad desconocida (la búsqueda de alojamiento y trabajo, la soledad, las primeras amistades...) y no se olvida de reservar un clímax espectacular para el final. El camino hacia la madurez de Nicky, que paulatinamente deja de tener un comportamiento impulsivo e infantil para ser más consciente de su oficio, tomar responsabilidades y coquetear con el amor, está tratado con una franqueza y sencillez extraordinarias, propia de una de las mejores Bildungsroman audiovisuales que se pueden encontrar.

A favor: La siempre fabulosa unión de candor humano, cotidianeidad y belleza paisajística en las películas de Miyazaki.

En contra: Cuando la película fue distribuida por Disney en Estados Unidos años después de su estreno, el doblaje inglés cambió algunos aspectos como la personalidad de Jiji.