Críticas
2,5
Regular
Divorcing Jack

Perseguido por todos

por Xavi Sánchez Pons

Las películas que juegan a descolocar al espectador, que apuestan por la mezcla de tonos, que pasan de la comedia al drama en un abrir y cerrar de ojos, de la seriedad a la astracanada en un plano, siempre caminan en un fino alambre en el que es difícil mantener el equilibrio. Divorcing Jack es una esos filmes, y no siempre consigue mantener el peso de la balanza equilibrado.

La historia, que parte de una novela de Colin Bateman sobre un periodista borracho, Dan Starkey, especializado en política en una Irlanda del Norte en pleno proceso de elecciones, tiene un primer tramo que viene a ser una versión norirlandesa del Alta Fidelidad de Stephen Frears-Nick Hornby. Tras esa espléndida introducción, la película se rompe con un suceso dramático y la función se convierte en una comedia negra de ecos tarantinianos. El director, David Caffrey, no se corta a la hora de mostrar los momentos menos amables de las peripecias del protagonista. Ahora bien, es en la ensalada de géneros, en las transiciones de lo cómico a lo dramático, donde Divorcing Jack no funciona.

A favor: el breve pero encantador papel de Laura Fraser

En contra: la mezcla de géneros le resta pegada a la historia