Critica de la película J. Edgar por actor97

Clint Eastwood siempre ha sido un director correcto haciendo, en ocasiones, grandes obras. "J. Edgar" no es su mejor película, pero no merece las tan bajas calificaciones y críticas que ha obtenido en EE.UU. Claro que esas son tierras en las que se ve, reflejado sobretodo en el cine, su instinto de superioridad o, incluso, de perfección. Ahí es donde encuentran el problema: el hombre más importante en el mundo de la investigación del país está relacionado, por hechos desaprobados, con grandes figuras políticas, estrellas, además de mostrar una sociedad homófoba, racista e hipócrita. A partir de ahí, la película se desarrolla con un buen guión de Dustin Lance Black que lo enfoca de manera autobiográfica, es decir, la trama la narra el propio Edgar dirigido a un periodista que tiene intención de publicar un libro sobre el famoso director del FBI. El planteamiento es algo similar al de la película "La dama de hierro" (2011) dónde la famosa Margaret Thatcher relata sus experiencias a base de flashbacks, aunque en "J. Edgar" todo fluye con más limpieza y maestría, aunque con la misma polémica. Leonardo DiCaprio hace una de las mejores interpretaciones de su carrera (sin alcanzar, injustamente, la nominación en los premios Óscar y haciendo una labor mejor que otros postulantes como Demiàn Bichir por "Una vida mejor" o Brad Pitt por "Moneyball"). La destreza de DiCaprio para poder trasmitir el espíritu de Hoover es magnífico, claramente apoyado por una gran caracterización. Naomi Watts y Judi Dench están correctas, pero el reparto masculino del filme resulta más eficaz. Armie Hammer está brillante en uno de sus primeros papeles, defendidos de maravilla y mostrando una gran compenetración con el protagonista. Técnicamente, "J. Edgar" es una película sobresaliente destacando el don de Eastwood para jugar con las luces siempre mostrando ambientes oscuros con poca claridad y un excelente trabajo de caracterización conviritendo a DiCaprio y Watts en auténticos ancianos, aunque menos verosímil con Hammer. En resumen, no es un gran clásico de Eastwood, pero es una de las mejores películas del año.