El célebre realizador Youssef Chahine, de 82 años, murió ayer en el hospital militar de Maadi, a las afueras de la ciudad de El Cairo, tras pasar seis semanas sumido en un profundo coma. El cineasta había sido hospitalizado el pasado mes de junio como consecuencia de una hemorragia cerebral de la que no ha podido recuperarse.
Autor de largometrajes como el 'Les Eaux noires' (1956), 'La Terre' (1969) o 'El destino' (1987), en 1997 obtuvo el Premio del 50 aniversario del Festival de Cannes por el conjunto de su obra. Entre los reconocimientos a su labor profesional también figura el Oso de Plata del Festival de Berlín, galardón que recibió por su película 'Alexandrie, porquoi?' (1978), la primera parte de una trilogía autobiográfica. 'La Memoire' (1982) y 'Alexandrie encore et toujours' (1989) completan esta saga en la que el cineasta echa la vista atrás sobre sus años de adolescencia y juventud en El Cairo.
Un director comprometido
Nacido en 1926 en la multicultural ciudad de Alejandría, Chahine comenzó su carrera artística a principios de los años 50 de la mano de Alvise Orfanelli, pionero del cine árabe. Comprometido en la defensa de las libertades, el director destacó por dotar de un componente humano al conjunto de sus películas, en las que también quiso dejar patente su ideología de izquierda y su rechazo al islamismo.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, elogió ayer la firme actitud de Chahine en favor de las libertades de expresión, individuales y colectivas así como su lucha por denunciar "la censura, el fanatismo y el integrismo". Por su parte, el presidente del Festival de Cannes, Gilles Jacob, tuvo también unas palabras de afecto hacia el realizador egipcio a quien definió como "un realizador valiente, un poeta imaginativo y un hombre libre desbordante de humanidad".
María Munín González (Fuente: El País)
