Paramount Pictures
Después de un largo y caro proceso de grabación, el equipo no sabía qué hacer con la película. Brad Pitt decidió llamar al escritor Damon Lindelof para que viese el montaje y dijese qué debían cambiar. Lindelof sugirió cambiar la escena final -una batalla en Rusia- por otra menos oscura, algo que resulta obvio en la película final. Después de ver a Brad Pitt como un héroe de acción recorriendo el mundo, la escena final en el centro de investigación es mucho más lenta, aunque llena de tensión.