La noche del baile, Peter recibe un paquete de Stark con el inversor. Lo guarda en su ropa y se encamina hacia el baile para encontrarse con Liz. Poco después de su llegada, Vulture aparece en mitad del Baile del Instituto Midtown para secuestrar a Harry. Peter se viste de Spider-Man y se encamina hacia Toomes.
El único problema del aparato de Tony Stark es que hasta que no se encuentre cerca de Toomes, no sabrá si funciona o no. Cuando el villano lo ve decide destruirlo antes de que pueda usarlo. Entonces, ambos continúan la lucha fuera del gimnasio, algo que Flash y sus amigos querrán seguir contemplando. Toomes se da cuenta de que Spider-Man está luchando tratando de evitar los daños colaterales, o queriendo reducirlos al máximo -se destroza parte de una escultura de Vengadores, dejando solo a Tony, Visión y Máquina de guerra-.
La lucha continúa en el tejado del edificio. Peter tratará de distraer a Toomes para que Harry pueda escapar, a la vez que salva a todos los estudiantes que se encuentran dentro del gimnasio, incluyendo a Flash y Liz.
Spider-Man va a Oscorp para reunirse con Norman, quien acaba de recibir un mensaje de Toomes con la dirección de un almacén abandonado, al que debe acudir solo. Norman sigue sus órdenes, con Spider-Man unos pasos por detrás tratando de arreglar el inversor en Oscorp. Una vez allí, encuentran a Harry, al que Toomes enseña todos los experimentos realizados por su padre. Al principio Harry se aleja de su progenitor, pero después él da la vuelta a los hechos explicando que todo lo ha hecho por él y en memoria de su madre.
Harry perdona a su padre, pero Buitre -más enfadado que nunca- se prepara para matar a Norman Osborn de una vez por todas. Spider-Man aparece justo a tiempo para que la familia escape y para enzarzarse en una batalla a través de Nueva York con el villano -se puede ver la torre Vengadores-. La lucha termina cerca de Oscorp, donde Peter usa una versión amplificada del aparato para vencer a Toomes, que acaba atrapado entre dos edificios en una red de telaraña.