Pixar
Cars 3 continúa así una de las franquicias más queridas de la animación, con un mensaje que, como nos decía su director, está unido al viaje de su protagonista Rayo McQueen. “Al final de lo que hablamos es de la necesidad de encontrar sentido a nuestras vidas. Las cosas que nos importaban cuando teníamos 20 años igual ya no son tan relevantes a los 45, y en consecuencia Rayo va a descubrir que puede que la vida tenga un sentido distinto para él en el momento en el que se encuentra, inmerso en ese proceso de redescubrimiento”.
Y el resultado es una película muy entretenida, intensa y emotiva, que lleva el universo de Cars y sus personajes a nuevas metas. Repleta de carreras espectaculares de distinta naturaleza, humor y emociones fuertes, Cars 3 enamora a un público de todas las edades.
Para rematar un día inolvidable tuvimos la oportunidad de subirnos a un coche de carreras y dar unas vueltas por el circuito de Sonoma, participando en una pequeña carrera con otros vehículos, de la mano de un piloto que sabía bien lo que hacia y que nos hizo admirar aún más, si cabe, a Rayo McQueen y a todos los profesionales de la velocidad.
