El estreno de Han Solo: Una Historia de Star Wars se producía el pasado mes de mayo, una decisión sorprendente teniendo en cuenta que el resto de trabajos de la saga habían llegado en Navidades, incluido el anterior 'spin-off', Rogue One. Ahora, se revela que esto se debe a la decisión de Disney, que no aceptó retrasar su llegada a cines, como pedía Lucasfilm.
Según ha informado el portal Star Wars News Net, la compañía de Kathleen Kennedy quería estrenar en diciembre de 2018, pero desde La Casa del Ratón prefirieron mantener la fecha fijada en primavera, al parecer frustrados por los retrasos vividos a lo largo de la producción. Además, se negaron a darle "trato preferente" de marketing, pues no querían que su promoción interfiriese con la de Vengadores: Infinity War, motivo por el que el tráiler de la cinta de Ron Howard se estrenó tan solo tres meses antes de su debut en salas.
Una vez comprobados los malos resultados en taquilla de la cinta protagonizada por Alden Ehrenreich, que no ha funcionado tan bien como las anteriores entregas de la saga iniciada por George Lucas, se empezó a especular que la fecha de estreno podría haber sido uno de los motivos de esta caída, sobre todo por la competencia con la que ha contado en esas fechas. Sea cual sea el motivo, su decepcionante taquilla parece haber afectado a futuros trabajos de Star Wars, pues todo indica que tanto el proyecto sobre Obi-Wan Kenobi como el de Boba Fett están pausados y que, de momento, se centrarán en el Episodio IX, que se estrena el 20 de diciembre de 2019.
