Si te quedaste en Dragon Ball y Oliver y Benji, quizá te sorprenda saber que hay una serie que las ha superado a todas en ventas: Kimetsu no Yaiba, más conocida en España como Guardianes de la noche, ha vendido una medida de 6,52 millones de unidades de cada tomo del manga (23 en total), superando a Goku y sus amigos, Slam Dunk y hasta One Piece. La historia de Koyoharu Gotouge duró tan solo cinco años, de 2016 a 2020, y de momento se ha recopilado en tres temporadas de anime y tres películas. De hecho, la última, Rumbo al entrenamiento de los pilares, ha sido un exitazo pese a ser solo un recopilatorio.
Akimetsu no hay quien viva
Vamos, que si no conoces Kimetsu no Yaiba, básicamente has estado viviendo bajo una piedra durante los últimos cinco años. Y se nota en cuanto pisas un salón del manga o un lugar donde haya gente haciendo cosplay: allá donde mires puedes ver a Tanjiro, Nezuko, Zenitsu o Inosuke, pero hay un personaje que destaca por encima de todos los demás: Mitsuri Kanroji, el Pilar del Amor con una espada que se dobla como un látigo y cuya actitud positiva ha robado los corazones del público.
Y para muestra, esta cantidad de cosplays que clavan las trenzas, el pelo rosa y hasta la espada-látigo del personaje. No hace falta irse a buscar en Internet, de todas maneras: sobre todo a partir del épico final del manga ha sido recordada por miles y miles de fans que se han disfrazado de ella en cualquier convención.
Kimetsu no Yaiba estrenará su temporada 4 este año, y es normal que en el estudio estén intentando alargar la historia todo lo que puedan, porque van por el tomo 15 y solo les quedan 8 antes de quedarse sin material, lo que pueden ser dos o tres años más, según la duración de las temporadas, el relleno que quieran meterle y la calidad de los episodios. Una cosa está clara: su público ya le tienen, y la franquicia va a durar años y años. Esperemos que lo haga en un buen estado de salud, al menos.