En una de las noches más duras de la historia reciente de nuestro país, tres hombres se mantuvieron en su sitio a pesar de las más que evidentes amenazas de muerte. Estos hombres eran Adolfo Suárez, Santiago Carrillo y Gutiérrez Mellado, Presidente del Gobierno, Secretario General del Partido Comunista de España y el Vicepresidente del Gobierno y Ministro de Defensa. En esa noche, la democracia que tanto había costado alcanzar pendía de un hilo. La conocida como 'Noche de los transistores', el 23-F, el golpe de Estado de 1981.
Ahora, Alberto Rodríguez (Los Tigres) presenta Anatomía de un instante, una miniserie de cuatro episodios que relata esa noche fatídica que estuvo de tirar por la borda la incipiente democracia que apenas habían comenzado a saborear los españoles. Una serie que se beneficia de un reparto de muchísimos quilates: Álvaro Morte da vida a Adolfo Suárez y Eduard Fernández y Manolo Solo hacen lo propio con Santiago Carrillo y Gutiérrez Mellado.
Ponerte en la piel de alguien tan importante como Adolfo Suárez y verte en ese sitio tan imponente como el Congreso de los Diputados, que por cierto nunca había visitado, fue algo verdaderamente emocionante
Rodar en el Congreso de los diputados: "Santiago supo que si mataban a alguien esa noche, era a él"
Efectivamente, Anatomía de un instante ha logrado lo que pocas series o películas, que le permitan rodar dentro del Congreso. Para David Lorente, que da vida al 'villano' de la historia, Francisco Tejero, ha sido "uno de los momentos más emocionantes de mi carrera. La energía que yo sentí cuando subí a las escaleras del Congreso, haciendo el movimiento que él hacía con la pistola en la mano, con 300 figurantes, con todo el equipo concentrado... me emociono todavía porque le da mucho valor lo que uno hace".
Manolo Solo tampoco había estado nunca en el Congreso. "Me hacía mucha ilusión. Fue muy potente entrar en un sitio con tanta historia, y además revivir este acontecimiento. Por su parte, Eduard Fernández aprovecha para contar una anécdota real que se vivió esa noche, aprovechando que da vida a Carrillo: "Santiago supo que si mataban a alguien esa noche, era a él. Así que pensó que qué imagen querría que quedara de él para la posteridad, la de alguien tumbado en el suelo o sentado en el escaño. Y se quedó sentado".
¿Cómo se ha podido adaptar el actual y renovado Congreso de los Diputados a una época en la que no había pantallas, por ejemplo? El director, Alberto Rodríguez, lo cuenta en la pieza que te presentamos en exclusiva. No te la pierdas, como no has de perderte el estreno, el próximo 20 de noviembre, de Anatomía de un instante.