Otro capítulo en el que aparecen imágenes perturbadoras es "The Splinter". Bob Esponja se clava un trozo de madera en el dedo y la infección que sufre después alcanza dimensiones brutales, llegando a bañar al Señor Cangrejo en pus. Las críticas decían que ese humor al estilo Padre de Familia era de muy mal gusto y no apto para niños.