Mientras Carl Chinn hacía su investigación se dio cuenta de que muchas familias de antiguos Peaky Blinders no conocían el pasado de sus antepasados, o conocían solo los detalles básicos. Simplemente era un tema que no se trataba en sus casas: "Muchos miembros de la banda no hablaban de ello cuando se hacían mayores, muchas veces estaban avergonzados de lo que habían hecho cuando eran jóvenes".
Además, confiesa los motivos por los que inició la investigación que le llevó a escribir un libro: "No excuso su comportamiento. No lo hago romántico porque, en realidad, era brutal. Muchos periódicos se volvían histéricos sobre las peleas de bandas, pero es importante recordar que no había nada como la mafia de América. No era gente admirable, pero creo que hay una historia que contar".